Nuevas variantes surgen, que impactan en el proceso de democratización en México, como la violencia vinculada al narcotráfico, el desequilibrio en los poderes constitucionales y la percepción de corrupción.

Una Democracia Plena en el Siglo XXI representa la base fundamental para regir la vida de un Estado. Fija los límites y define las relaciones entre los poderes y de éstos con sus ciudadanos. Establece las leyes del gobierno y las organizaciones públicas, trata de garantizar al pueblo sus derechos y libertades. Según el Índice de Democracia 2012, México se encuentra en una Democracia en consolidación. Es un país que por sus características políticas, culturales, geográficas, de su propia historia, se encuentra aún en el subdesarrollo y en proceso de democratización. México tiene rasgos significativos de gobernabilidad. Sin embargo, existen variantes que están impactando este proceso, y que pudieran ser factor de primordial para que la democracia objetivo se cumpla a un corto, o mediano o largo plazo. Todo dependerá de atender las variantes como  el narcotráfico, la violencia y el desequilibrio institucional, entre otras.

Palabras Claves: Democracia, Desequilibrio Institucional, Violencia, Narcotráfico, Percepción de corrupción.

Universidad Anáhuac de Xalapa.
Lic. Roberto Antonio Pérez González.
Xalapa, Veracruz.
20 de junio de 2014

Introducción.
La democracia sigue siendo la preferencia de la mayoría de las personas en el mundo. Y se debe a que produce una gobernabilidad equilibrada, elecciones justas, libertad de expresión, respeto a las minorías y respeto a los derechos humanos fundamentales. Sin embargo, en México están afectando este proceso de democratización por otras variantes nuevas. ¿Qué es lo que sucede en la democracia en México?, ¿Por qué no podemos consolidar una democracia plena? ¿Por qué México no puede explotar sus riquezas convirtiéndose en un país rico a nivel mundial? La democracia, desde un punto de vista de valor, conserva un fuerte atractivo en todo el mundo, de ahí la importancia de analizar sus aspectos más significativos y conocer su aplicación en México.

Democracia en México y sus variables estructurales.
De acuerdo al Índice de Democracia 2012, podemos entender lo siguiente: “Los países de acuerdo a sus características políticas pueden colocarse en cuatro tipos de regímenes: Democracia Completa, Democracia Imperfecta, Regímenes Híbridos y Regímenes Autoritarios” (Democracy Index 2012, 2013:1). Sin embargo, existen variantes que influyen para que se dé o no, un proceso de democratización en México; por ejemplo la percepción de corrupción en el sector público, la violencia ocasionada por el narcotráfico y el desequilibrio institucional en las organizaciones públicas y privadas. De acuerdo al Índice de Democracia 2012, el ranking general del proceso de democratización de México fue considerado por casi 3 unidades más democrático en el periodo de 2010-2011, correspondiente a la administración del ex Presidente de la República, Felipe Calderón Hinojosa. Sin embargo, para el 2012 cae 0.03 unidades. Lo anterior, se puede explicar por la continuación del Partido de Acción Nacional en el poder Ejecutivo. Pero, existe una cuestión clave que está quebrantando la democracia en la mayor parte de Latinoamérica, y que México lo vive actualmente, y es la influencia del crimen organizado y su capacidad para socavar la eficacia de las fuerzas de seguridad y las autoridades judiciales son un serio problema.

De acuerdo al INEGI, para el mes de marzo de 2014, 72.4% de la población de 18 años y más que reside en las capitales de los estados o ciudades de 100,000 habitantes y más, consideró que, en términos de delincuencia, vivir en su ciudad es inseguro. En comparación con el resultado del mes de diciembre de 2013, que fue de 68.0%, implica un incremento de 4.4 puntos porcentuales.
El último factor a considerar es el desequilibrio institucional, que refiere a los tres poderes constitucionales y que desencadena lentitud en el proceso de democratización. Es decir, el Poder Ejecutivo sigue siendo muy fuerte ante los otros dos. Sin embargo, su proceso operativo tiende a la corrupción, lo que sucede también en los otros dos poderes. El Poder Legislativo es comparativamente débil en muchos casos y en ocasiones es empleado del Poder Ejecutivo, y por último el Poder Judicial sufre de algún grado de politización en la resolución de la aplicación de las leyes para la impartición de justicia.

Conclusión
Sin duda alguna, México se encuentra se encuentra en un proceso de democratización a consolidar, pero que podría fracturarse por las vertientes antes explicadas. Indiscutiblemente, el narcotráfico está mermando la operación institucional de seguridad, educación y salud nacional, que se traduce en un desequilibrio social y económico. La población vive con miedo y el presupuesto federal va en aumento para otros ramos administrativos destinados a la seguridad nacional en contra de la delincuencia y narcotráfico, en lugar de enfocarse a ramos prioritarios como son salud, educación y tecnología. Por otra parte, las instituciones son corruptibles. México se encuentra en una posición desfavorable de acuerdo al Índice de Percepción de Corrupción Mundial. Esto ocasiona, por una parte que la población pierda credibilidad en sus instituciones y, por otra parte, las instituciones generan más leyes y reglamentos para la población con la finalidad de que se hagan cumplir los mandatos de gobernabilidad, sin llegar a resultados óptimos en términos de democracia. Por último, considero que la falta de atención a estas variables de violencia (narcotráfico), desequilibrio institucional y corrupción, son algunas variables que abran de considerarse como prioridad de atención para poder consolidar una democracia plena.